Vía 233 grados me entero de que el blogger de "The Times", Tim Kevan, decidió renunciar a su trabajo o colaboración en el diario por estar en desacuerdo con su nuevo modelo de pago. Es decir, él no cree que la gente deba pagar por leerlo, lo que no significa que piense que no tiene valor. De hecho, Kevan le da su propia valoración a lo que hace, que no tiene nada que ver con el dinero: "No empecé este blog para que sea privilegio exclusivo de unos pocos suscriptores. Lo escribí para entretener a todo el que quisiera leerlo", ha dicho, en una clara demostración de 'espíritu hacker'.
El valor es también el soporte de otro de los argumentos de News International para cobrar por los contenidos. "Estamos orgullosos de nuestro periodismo y no nos da vergüenza decir que creemos que tiene un valor", ha dicho Rebekah Wade, consejera delegada de la empresa, que parece haber descubierto el secreto de cómo medir el valor de una noticia.
Kevan no le reprochó a la empresa su política de pago, pero hizo algo mucho más fuerte, dio un mensaje, y un ejemplo. Un día antes de que "The Times" comience con su plan de ser un diario de pago, su primer golpe a la quijada viene desde adentro, de un tipo que es capaz de vaticinar que tendrán "unos pocos suscriptores". Es probable que pronto tengamos más noticias sobre lo que se podría conocer como "El caso The Times", o una pequeña lucha por el libre acceso a la información. Los 'hippies' versus los 'yuppies', podría decirse. Ya sabemos quién tiene más plata, pero ¿Quién ganará?
No hay comentarios:
Publicar un comentario